Mi historia es sobre mi madre, Maureen

 

Este evento tuvo lugar de a

 

El descubrimiento

En retrospectiva, mamà¡ habà­a estado experimentando sà­ntomas durante unos meses. Sus sà­ntomas incluà­an indigestià³n, hinchazà³n y dolor de espalda.
No fue hasta que su médico se preocupà³ de que tuviera una sobredosis de analgésicos cuando la enviaron al hospital para que le hicieran escà¡neres.

 

Esta es mi historia

En la familia de mamà¡ no hay apenas antecedentes de cà¡ncer y, desde luego, no hay antecedentes de cà¡ncer de pà¡ncreas.

Lo que todavà­a me cuesta hasta el dà­a de hoy, es lo rà¡pido que el cà¡ncer nos la arrebatà³ y lo cruel que es la enfermedad. Los niveles de dolor que experimentaba mamà¡ eran tan intensos, hasta el punto de que no querà­a estar mà¡s cerca y se le aprobà³ la muerte asistida voluntaria (legal en Canadà¡). Tenà­a entendido que estaba esperando a cumplir los 60 aà±os en septiembre. Sin embargo, el tiempo no estuvo de su lado y fallecià³ en agosto.

 

El impacto del tiempo

Mamà¡ no tuvo mucho tiempo, tuvo 5 meses entre que le diagnosticaron hasta que fallecià³: de abril de 2020 a agosto de 2020. Ella vivà­a en Canadà¡ en ese momento y una vez que mi hermano y yo supimos que se le estaba acabando el tiempo nos subimos a un avià³n (desde Australia) para estar con ella, una tarea nada fà¡cil en medio de una pandemia con cierre de fronteras. De hecho, fue hace 2 aà±os, el 31 de mayo.

Después de completar dos semanas de cuarentena en Canadà¡, mamà¡ fue dada de alta del hospital para que pudiéramos cuidarla en casa, con la ayuda de la familia, las enfermeras de atencià³n domiciliaria y los médicos. Tuve 3 semanas con mamà¡ antes de tener que volver con mi joven familia en Australia, y completar 2 semanas de cuarentena en el hotel. Mi hermano se quedà³ hasta que murià³ mamà¡ (1 mes después de que yo me fuera). Mi madre y mi hermano fueron increà­blemente valientes.