Mi historia es sobre mi hermana Viola Irving-Powell

Este evento tuvo lugar del 26 de enero de 2013 al 29 de enero de 2020

El descubrimiento

Mi hermana Vi habà­a estado teniendo dolor de espalda, dolor abdominal y pérdida de peso. Estaba siendo tratada por estos sà­ntomas pero con un diagnà³stico errà³neo en cuanto a la causa de los mismos. El 26 de junio de 2013 el dolor y la pérdida de peso se agudizaron tanto que fue llevada al hospital . Fue entonces cuando le dijeron que tenà­a cà¡ncer de pà¡ncreas. Nuestras vidas cambiaron para siempre.

Esta es mi historia

Perdà­ a mi hermana el 7 de junio de 2013, tras sà³lo cuatro cortos meses de lucha contra el cà¡ncer de pà¡ncreas. Tenà­a previsto participar en su primera PurpleStride el 15 de junio de 2015, pero en su lugar celebramos su funeral en esa fecha. ¿Cà³mo ha podido ocurrir esto? Cà³mo podrà­a estar enterrando a mi hermana de 53 aà±os y mejor amiga. Le prometà­ un mes antes que si no sobrevivà­a a la enfermedad seguirà­a apoyando a PanCAN y a la causa. Recuerdo que el dà­a después de enterrar a mi hermana me pregunté: «Â¿Qué hago ahora? La respuesta me llegà³ rà¡pidamente… Sigue luchando para que otros no tengan que experimentar lo que tຠestà¡s viviendo. Es a través de esta lucha que he conocido a algunas personas increà­bles que està¡n (estaban) en la lucha conmigo. Uno fue mi valiente amigo Adam Deal, que se convirtià³ instantà¡neamente en mi hermano virtual y luchamos juntos hasta que terminà³ (no perdià³) su batalla en diciembre de 2020, y mi querida amiga Sang Watts, que terminà³ su lucha en mayo de 2021. Lucharon con la valentà­a y el coraje de un guerrero intrépido. Es duro cuando consigues el resultado o la curacià³n por la que rezas y luchas. Te derriba con fuerza, pero te vuelves a levantar y recuerdas que ahora està¡s a cargo de mantener a estos individuos en la lucha y sus recuerdos vivos. Eso es lo que les debo. Es lo menos que puedo darles. Cuando deje esta tierra, ruego que parte de mi legado sea haber ayudado a cambiar el resultado de esta enfermedad. Dentro de un aà±o, la historia rendirà¡ homenaje a todos los que lucharon por cambiar la historia y el rostro del cà¡ncer de pà¡ncreas.

El impacto del tiempo

Tuvimos muy poco tiempo desde el diagnà³stico hasta la muerte con mi hermana. Le diagnosticaron el 26 de enero de 2013 y murià³ el 7 de junio de 2013 que era el cumpleaà±os de mi hermano. Ojalà¡ estuviera mà¡s informada sobre los signos y sà­ntomas del cà¡ncer de pà¡ncreas antes de que diagnosticaran a mi hermana. Todos los dà­as pienso en la formacià³n que tengo sobre la enfermedad y los recursos disponibles a través de PanCAN. No pasa un dà­a sin que me arrepienta de no haberme tomado el «TIEMPO» de ser mà¡s consciente de esta enfermedad. Habà­a oà­do hablar de varias personas de alto nivel e incluso de un colega que habà­a sido diagnosticado. Siempre me ha hecho reflexionar y sus historias han captado mi atencià³n, pero no he seguido mi instinto para saber mà¡s. Pienso en ello todo el tiempo, pero esta es la primera vez que lo escribo o incluso que admito mis sentimientos, el arrepentimiento y la culpa. Cà³mo me gustarà­a haber seguido mi instinto de leer y aprender mà¡s. El tiempo es lo mà¡s valioso que tenemos. Siempre deseando mà¡s, pero ¿tenemos cuidado de no malgastar o utilizar mal lo que tenemos? Desde que perdà­ inesperadamente a mi hermana y a mi madre, aprovecho cada segundo de mi tiempo para marcar la diferencia en el trabajo. Es nuestro bien mà¡s preciado.